Siempre es bueno agradecer por lo que tienes, por los momenos que pasas o incluso por la gente que conoces…

Ha sido toda una experiencia ser coordinadora de bodas, trabajar con las emociones es un regalo
más que un trabajo, son tantos los novios con lo que he compartido lindos momentos que a veces
todas esas alegrías y emociones permanecen en la casona y creo que eso forma parte de su magia
que te abraza y respira como si cobrara vida.
Muchas gracias a todos, a los que recuerdo y a los que mi débil mente ha olvidado, pero que sin
duda forman parte de mi aprendizaje y de mi eterno agradecimiento. Muchas gracias a las
Carolinas, Andrés, Juanes, Danielas, Matias, Paulas, Cristóbal, María José, Isidoras, Fernandas,
Hernan, Miguel, Camilas, Vicentea, Anitas, y tantos y tantos más…… a todos mil gracias!