
En un matrimonio, los padrinos cumplen un rol principalmente afectivo, simbólico y de apoyo, más que legal. Sus funciones pueden variar según la tradición de cada pareja, pero en general incluyen:
- Ser apoyo emocional para los novios
Los padrinos representan a personas muy significativas en la vida de la pareja. Acompañan en los preparativos, calman nervios y están presentes en los momentos clave.
- Acompañar durante la ceremonia
En matrimonios civiles o simbólicos, suelen caminar con los novios, entregar los anillos o estar a su lado durante el rito principal.
En matrimonios religiosos, cumplen funciones específicas según la iglesia.
- Ser testigos afectivos del compromiso
Aunque los testigos tienen un rol legal, los padrinos tienen un rol del corazón: dan fe de la relación, del amor y del camino que los novios han recorrido.
- Representar a las familias o amistades más cercanas
Muchas veces son personas que los novios admiran, respetan o consideran parte fundamental de su historia.
- Ser un apoyo en la vida matrimonial
Tradicionalmente, los padrinos se consideran alguien a quien acudir en momentos importantes, para conversar, celebrar o incluso recibir un consejo.

Elegir a los padrinos es elegir a esas personas que han estado ahí en los momentos que realmente importan: en las risas, en las dudas, en los comienzos y en los renacimientos.
Son quienes conocen su historia, celebran su amor y los acompañan con el corazón abierto.
Porque un padrino no solo está el día de la ceremonia… está en la vida, sosteniendo, aconsejando y recordándoles siempre por qué se eligieron.