En un matrimonio, los padrinos cumplen un rol principalmente afectivo, simbólico y de apoyo, más que legal. Sus funciones pueden variar según la tradición de cada pareja, pero en general incluyen:

  1. Ser apoyo emocional para los novios

Los padrinos representan a personas muy significativas en la vida de la pareja. Acompañan en los preparativos, calman nervios y están presentes en los momentos clave.

  1. Acompañar durante la ceremonia

En matrimonios civiles o simbólicos, suelen caminar con los novios, entregar los anillos o estar a su lado durante el rito principal.
En matrimonios religiosos, cumplen funciones específicas según la iglesia.

  1. Ser testigos afectivos del compromiso

Aunque los testigos tienen un rol legal, los padrinos tienen un rol del corazón: dan fe de la relación, del amor y del camino que los novios han recorrido.

  1. Representar a las familias o amistades más cercanas

Muchas veces son personas que los novios admiran, respetan o consideran parte fundamental de su historia.

  1. Ser un apoyo en la vida matrimonial

Tradicionalmente, los padrinos se consideran alguien a quien acudir en momentos importantes, para conversar, celebrar o incluso recibir un consejo.

Elegir a los padrinos es elegir a esas personas que han estado ahí en los momentos que realmente importan: en las risas, en las dudas, en los comienzos y en los renacimientos.
Son quienes conocen su historia, celebran su amor y los acompañan con el corazón abierto.
Porque un padrino no solo está el día de la ceremonia… está en la vida, sosteniendo, aconsejando y recordándoles siempre por qué se eligieron.